Quito, 20 de septiembre de 2018. Unidades de especiales de la Policía Nacional y la Fiscalía realizaron el operativo «Impacto 357”, que permitió desarticular una organización delictiva que realizaba robo a domicilios y a personas en Chimborazo, Azuay y Loja.

Las oportunas investigaciones de la Unidad de Inteligencia Antidelincuencial (UIAD) lograron identificar roles y funciones de cada integrante de la estructura delictiva. El general Enrique Espinoza de los Monteros, director Nacional de Policía Judicial e Investigaciones, informó que se identificó la forma de operar de la banda, quienes con amenazas e intimidación sometían a las víctimas y sustraían sus objetos de valor, para luego huir en varios vehículos.

Según Espinoza, mediante orden de la autoridad competente, en coordinación con Fiscalía y el apoyo operativo táctico y técnico de las unidades policiales, se ejecutó la operación policial en la cual se detuvo a siete personas y se allanaron nueve inmuebles; dos ubicados en Riobamba, uno en Cuenca y seis en Loja.

Los detenidos y las evidencias fueron ingresados a la zona de aseguramiento temporal de la Unidad Judicial del Azuay, los primeros para ser sometidos a la audiencia de formulación de cargos por el delito de asociación ilícita y las evidencias fueron trasladadas a la Policía Judicial bajo cadena de custodia.

Entre las evidencias encontradas están tres vehículos, catorce electrodomésticos, siete  terminales móviles, cuatro televisores,  diez perfumes, dos joyas, una cámara de fotos, cuatro tabletas, seis relojes, un computador de escritorio, dos cuadros, dos cascos, una pieza de hierro fundido (pata de cabra), tres memorias flash, varios documentos y prendas vinculantes para la investigación.