Guayaquil, 8 de febrero de 2019.- Paz, violencia, delitos, efectos de la migración en países vecinos y los retos en la zona fronteriza fueron debatidos en el Foro Internacional “Problemas de la Frontera Colombo-Ecuatoriana”, desarrollado este viernes 9 de febrero en el Aula Magna de la Universidad Católica de Guayaquil.

En el evento participaron la ministra del Interior, María Paula Romo; el titular del Ministerio de Defensa; Oswaldo Jarrín; y la coordinadora académica del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU), Miriam Estrada. Además, en representación de Colombia, estuvo el alto consejero presidencial en Derechos Humanos y Asuntos Internacionales, Francisco Barbosa; y el director de Migración, Christian Krüger.

“Tenemos una expansión de la delincuencia organizada, no solo en nuestro país, sino en la frontera y la región”, sostuvo la ministra Romo quien puntualizó que, a pesar de que Ecuador está en el corazón de Sudamérica (región con la tasa más alta de muertes violentas), ha logrado tener una mejor situación en ese tema ya que cuenta con la segunda tasa más baja de muertes violentas en la región: 5,7 por cada 100 mil habitantes. Aunque, en la franja de frontera con Colombia, hay una alteración considerable: 365 muertes violentas por cada 100 mil habitantes en 2018, según cifras publicadas por la Coordinadora Regional de Investigaciones Económicas y Sociales (CRIES).

En Ecuador, la Policía Nacional ha disparado los controles en la lucha contra el narcotráfico para impedir que grupos delictivos se abastezcan de precursores para los laboratorios de sustancias estupefacientes. “Incrementamos en 200% la incautación de precursores sólidos y en 800%, la de precursores líquidos”, refirió la ministra y destacó que el año pasado fueron desarticulados 178 grupos criminales y se recuperaron 21 millones de dólares en activos.

También informó que en esa zona Carchi tiene 33 unidades de Policía, Esmeraldas, 85; Imbabura, 40; Sucumbíos, 35. En total, existen 193 unidades de Policía fijas y 209 unidades móviles que suman 4.715 uniformados. Y en cuanto a los retos en materia de seguridad, la ministra Romo que la cartera del Interior alista un Plan Nacional de Seguridad Ciudadana, Seguridad Pública y Convivencia Pacífica 2019-2030. “Los sinónimos de la paz no son solamente el control y la fuerza del Estado; sino también, derechos, imperio de la ley, no violencia, desarrollo, empleo, oportunidades y esa es una tarea compartida por todos”, precisó.

Por su lado, el ministro de Defensa destacó la importancia del denominado Libro Blanco, en el que se establecen políticas para el desarrollo integral de la frontera norte, con el objetivo de controlar influencias transnacionales que afectan la paz en esa zona. También refirió que está pendiente un Plan de Paz Cooperativa que, a su criterio, debe elaborarse en conjunto con Perú y Colombia respetando con la soberanía y con el objetivo de vivir en paz.

La coordinadora académica del Consejo de Seguridad de la ONU, en cambio, apuntó sus preocupaciones en torno a los efectos de la corrupción que “ha permeado hasta la médula la institucionalidad nacional y ha corroído, incluso, los pilares de la seguridad ciudadana y, peor aun, las filas de las instituciones que deben –por mandato constitucional– garantizar la seguridad de la República”, manifestó.

En tanto que las autoridades colombianas, Francisco Barbosa y Christian Krüger, abordaron el impacto de la migración, enmarcado en la crisis humanitaria generada por la salida de millones de venezolanos afectados por la situación de su país.