El GOE rompe paradigmas al recibir a su primer grupo de aspirantes femeninas

Quito.- Este 29 de mayo, como anualmente ocurre, se inició el curso para los futuros comandos del Grupo de Operaciones Especiales(GOE). Sin embargo, el panorama fue diferente ya que por primera vez se recibía a mujeres policías en una Unidad Estratégica y Táctica de la Policía Nacional.

Por 24 años, el GOE fue netamente una unidad masculina por el rol que desempeñaban en sus operaciones, entre ellas el auxilio a las demás unidades policiales del Ecuador en cuanto a inteligencia, operativos antinarcóticos; rescate en lugares de difícil acceso; protección a personas importantes y la capacitación en operaciones especiales.

En casi un cuarto de siglo, la Unidad ha madurado en todos los ámbitos estratégicos, tácticos, tecnológicos, operacionales y sobre todo en talento humano, pues cuentan con la capacidad física y psicológica para servir a la comunidad con calidad.

Anualmente se reciben alrededor de 900 postulaciones a través de la página de la Dirección General de Personal (DGP), de éstas apenas 90 superaron con éxito las pruebas académicas, médicas, físicas, psicológicas y el test de confianza.

Ha transcurrido un mes desde que inició el curso y en las aulas apenas se cuenta con 35 aspirantes a comandos, entre ellos cuatro mujeres que han demostrado fortaleza, alto desempeño y compromiso con la unidad. Al momento dos de ellas se encuentran entre los cinco mejor puntuados, disputándose la primera antigüedad, rompiendo el paradigma de que las mujeres son el sexo débil.

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El teniente coronel Fabián Codel, comandante nacional del GOE señala que es un orgullo poder formar parte de la historia, ya que el ingreso de mujeres a las filas del GOE es un hecho que marca nuevos precedentes. Para esto se han tomado las medidas necesarias con el fin de respaldar el sueño de las aspirantes de obtener la boina símbolo representativo de los comandos.

El curso tiene una duración de siete meses intensivos, con una pesada carga horaria en la que se mezclan actividades físicas, psicológicas y de conocimiento. Un día normal de formación inicia desde las 5 de mañana con actividad física y termina alrededor de las once de la noche representando un gran esfuerzo para los aspirantes. Así lo señala el instructor, mayor Roberto Santamaría, comandante del GOE de Chimborazo y de la Escuela, quien resalta el impacto positivo de la presencia femenina y el compañerismo que se siente entre los futuros comandos, que no permiten que las precursoras desmayen en el camino al cumplimiento de sus sueños.

Aspirantes

Tras conocerse la noticia, de inmediato nos dirigimos a las instalaciones del GOE para recoger las motivaciones y aspiraciones de éstas nacientes comandos, sin saber que nos encontraríamos con una nueva cara del feminismo, un lado olvidado y poco explotado por los medios y por el mundo en general.

Al mantener un diálogo extenso con la subteniente Johanna Almeida, cabo primero Wendy Palmiro y policía Josselyn García, escuchamos sus sueños y aspiraciones de formar parte de una Unidad Étile. El apoyo y respaldo físico y psicológico recibido por sus familias, compañeros, autoridades, las comodidades físicas con las que cuentan en las instalaciones, ha permitido que no se vulneren sus derechos.

Señalan que su aspecto físico ha variado por una decisión personal, pues consideran saludable e higiénico el haberse rapado el cabello, además que les brinda mayor facilidad en el desempeño de las distintas actividades físicas. Consideran importante conservar la esencia femenina en el interior de cada una, lo que no les impide desempeñarse en los distintos roles con total eficiencia y eficacia.

Esta es otra de las muestras del profundo cambio que experimenta la Policía Nacional ecuatoriana, donde las barreras se rompen, afianzando el concepto de equidad de género. El principal objetivo es el trabajo con la comunidad, en el apego estricto al respeto de los derechos humanos y de igualdad, en pro de una convivencia social y pacífica. Redacción JT/ Quito.