BOLETÍN OFICIAL 139

Quito, 03 de junio de 2020. – “Vivir una emergencia como esta en el marco de la democracia es un punto a favor para la Policía Nacional y es el resultado de una actuación correcta, prudente y cuidadosa en momentos de altísima tensión. Sobre sus hombros ha descansado buena parte de que esta inédita emergencia se haya tramitado en democracia”, afirmó la ministra de Gobierno, María Paula Romo, en la ceremonia de ascenso al grado de Teniente Coronel de Policía de servidores policiales directivos de la “LXI Promoción de Oficiales de Línea”. Este acto, que se desarrolló como parte de la reanudación progresiva de actividades, se llevó a cabo en la Escuela Superior de Policía “Gral. Alberto Enríquez Gallo” y contó con la presencia del comandante general, Patricio Carrillo, así como demás miembros del Mando Policial.

“La última vez que estuvimos en una ceremonia aquí con la Policía, con la presencia del Presidente de la República, fue el 2 de marzo, reconociendo su trabajo y premiando a quienes habían tenido una actitud heroica en el último año. Desde ese día, han transcurrido tres meses y una semana. 99 días en los que el Ecuador ha cambiado mucho y la Policía también. Hemos perdido a 22 servidores policiales que ofrendaron su vida en servicio, la mayor cantidad de uniformados de los últimos 10 años”, resaltó la Secretaria de Estado y recalcó que, durante la pandemia, la Dinased, Criminalística y Policía Judicial han hecho el levantamiento de más personas fallecidas que lo que se hace durante muchos años por crímenes violentos dentro de la Institución.

La Ministra de Gobierno fue enfática al felicitar la actuación durante la emergencia sanitaria de los policías de todo el Ecuador, ya que además de combatir al delito con responsabilidad, acudieron al auxilio de mujeres y niños en riesgo de violencia al permanecer en aislamiento en sus casas con sus agresores. “También se dedicaron a los controles de personas en aislamiento preventivo obligatorio, a sancionar a quienes incumplían las medidas sanitarias, a garantizar la movilidad del uso de los salvoconductos y el funcionamiento de los corredores logísticos, verificando que estén activadas todas las tareas esenciales de la economía. Sin embargo, la Policía también estuvo presente investigando y sancionando casos de corrupción en lo público y en lo privado; por ejemplo, deteniendo a ciudadanos que vendían píldoras, mascarillas o válvulas de oxígeno en las puertas de los hospitales, mientras que familias enteras sufrían por la amenaza de la vida de sus seres queridos”, destacó.

Adicionalmente, manifestó que el país enfrentará una crisis sin precedentes, alcanzando distintas dimensiones de seguridad, salud, economía. “Esta es la nueva seguridad, la de la convivencia pacífica, respetando las medidas de salud para salvar nuestras vidas. Pero es en las crisis en donde sabemos de qué están hechas las instituciones, y la Policía Nacional, una vez más, ha demostrado estar hecha de valor, solidaridad, empatía, disciplina, lealtad y obediencia a la Ley, de un profundo compromiso por cuidar los derechos y las libertades de la comunidad de la que forma parte y a la que se debe. Tienen una altísima responsabilidad los que hoy ascienden. Este es un reconocimiento de años de trabajo, sacrificio y entrega de ustedes y sus esposas e hijos. La Policía es una familia y, a su vez, sus familias son parte fundamental de nuestro trabajo; por eso, sean ciudadanos ejemplares para su sociedad; sigan siendo una institución ejemplar que sostenga al país en días tan difíciles como estos. Sus éxitos serán los del país”, concluyó.

Por su parte, el Comandante General dijo sentirse orgulloso del trabajo de todos los miembros policiales. “Ustedes son la fuente de energía y el nutriente que requiere la fuerza estratégica y el nuevo liderazgo que necesita nuestro país. Lo que nos corresponde a nosotros y a las nuevas generaciones es ostentar la jerarquía que representa la sabiduría, habilidad, actitud y conocimiento profesional para planificar, dirigir y transformar. Ustedes representan el deseo de influir con acciones patrióticas y con resistencia física, mental y emocional la decisión permanente de asumir los retos desde un espíritu ganador y de victoria. Son el motor del cambio de esta nueva policía, siendo la antítesis de la debilidad, la indisciplina, la mediocridad y la corrupción. Nuestros policías son hombres y mujeres profesionales que se esfuerzan cada instante para superar sus propios temores con confianza y transitar sin descuidar sus responsabilidades. Son seres humanos valientes que con inteligencia han enfrentado el delito y la violencia, garantizando la seguridad y que funcionen los servicios esenciales durante esta triple emergencia. Gracias por asumir los retos y forjar la institucionalidad”, subrayó el general Carrillo en la ceremonia de ascensos.