302 subtenientes se incorporan a las filas de la Policía Nacional
Quito.- La tarde de este miércoles se realizó el cambio de insignias de mando e imposición de condecoración a la LXXVII promoción de oficiales de línea de la Escuela Superior de Policía «Gral. Alberto Enríquez Gallo». El evento contó con la presencia del Alto Mando Policial.
El esfuerzo de 302 cadetes por fin dio sus frutos al recibir las insignias que los reconocen como los nuevos subtenientes de la institución uniformada. 151 hombres y 51 mujeres durante cuatro años tuvieron que dejar a sus familias para ver cristalizado sus sueños. Extensas jornadas académicas e innumerables actividades forjaron el camino de los subtenientes que se integran a las calles para velar por la seguridad de los ecuatorianos.
En el primer semestre de formación académica 11 cadetes se destacaron y obtuvieron las primeras antigüedades, con ello pueden continuar sus estudios en el extranjero. 10 cadetes se prepararon en la Escuela de Cadetes de Policía General Santander en Colombia y una cadete en la Escuela de Carabineros del General Carlos Ibáñez del Campo en Chile.
La Septuagésima Séptima promoción tiene un reconocimiento particular, ya que cuenta con la primera cohorte de Licenciados en Ciencia Policiales y Seguridad Ciudadana de la Universidad Central, gracias a un convenio cerrado entre el Ministerio del Interior y la Institución Superior. 291 cadetes obtuvieron doble titulación.
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Las notas del Himno Nacional marcaban el inicio de la emotiva ceremonia, en la que participaron el Alto Mando Policial, los cadetes y sus familiares.
Uno a uno los cadetes recibían sus insignias de sus superiores en compañía de sus padres, quienes emocionados abrazaban a sus hijos al ver cumplir una etapa más en sus vidas.
La coronel Tania Varela, directora de la Escuela Superior de Policía Gral. Alberto Enríquez Gallo, señaló que los principios que rigen la vida de un Policía son valor, disciplina y lealtad cobijados bajo el sueño de servir y proteger a la comunidad. Enfatizó que los oficiales se incorporan a las calles con el firme objetivo de consolidar la seguridad ciudadana y la convivencia pacífica que los ecuatorianos necesitan.
La subteniente Michelle Jara señaló que no existen palabras que describan la emoción que significan para ella concluir su etapa académica, al tiempo que resaltó que “ser Policía es la mejor profesión, ya que se sirve a la sociedad. Su madre Teresa Carrillo dijo sentirse orgullosa al ver a su hija superar sus objetivos y convertirse en guardián de la seguridad.
El evento concluyó con la oración del Policía y el Himno de la institución uniformada dando pasó a las felicitaciones informales de sus familiares, que por varios años tuvieron que sentir su ausencia. Ni el frío, ni la llovizna impidieron la alegría de los 302 subtenientes y sus familiares que participaron en la LXXVII promoción de oficiales de línea de la Escuela Superior de Policía «Gral. Alberto Enríquez Gallo».
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